Lo erótico tiene su medida de romanticismo
su dosis de encanto y de ternura
Una mezcla singular de la pasión y el deseo
Sin esta amalgama
lo erótico no tendría equilibrio en la escritura
Hay que situar al Lector en el momento
No es abrir el poema en el coito
sino conducirlo
disfrutarlo
Penetrar como quien penetra un cuerpo
sin hacer caso omiso del gemido
y la fuerza de la entrega en el desboque
de las sensaciones y los sentimientos
Marina Centeno
Yucatán México