jueves, 28 de julio de 2016

OBJETIVIDAD Y ENTRESIJO DE PALABRAS



Después de alternar con las noticias
se quedó a la diestra para alcanzar el humo
mientras flotaba en el ambiente un olor a dolor

Nada sabe a tristeza más que el mundo
apretando las tuercas de la inmediatez
sin embargo -dijo- que las manecillas
corren tropezando tras el nunca
y el empate es alternar con los artistas
mientras surge el aplauso de las masas
esperando la luz del "festival"

Con objetividad y gruesas intenciones
va buscando el ambiente que propicia
el cerrojo del miedo en las persianas
(porque existen lagunas que no alcanzan
a intentar persuadir al cibernaúta
cuando pasa el embudo en sus rodillas
y no hay estorbo que pueda fenecer
al adquirir abrojo en las columnas
del "cliche" que no alcanza a "clickear" )

Ahora todo me sabe a trota-mundo
Ahora todo me cuesta una empanada
Ahora todo se cuelga en las paredes

Debo estar en alerta por si acaso
las palabras renuncian al suicida
y se dejan caer al precipicio
de aquellos que somos los reclutas
con los trazos de miedo en la oscuridad

Sin embargo aún cabe la nostalgia
en las pausas del tiempo en la derrota
soportando el hastío que no acaba
de empatar golondrinas al paisaje

Admitir no es pleonasmo de la dicha
ni tampoco es capricho del disfraz
es más bien intención de ser la misma
deteniendo al poema en el umbral

Marina Centeno
De RESIDUOS